De inauguraciones y timones

En algún lugar de un gran país , el Premio Nobel de la Paz Liu Xiaobo, está en prisión por defender los Derechos Humanos, coartados y pisoteados desde siempre… al otro lado del mundo, otro Premio Nobel de la paz llena de alabanzas justamente a ese país opresor y violador, abusivo e intolerante.

Paradoja, servilismo?.... ambas?

No es la primera vez que Arias le hace un desplante a un Premio Nobel de la paz, recordemos que previo a la visita del presidente Chino, Hu Jintao, Arias le solicitó al Dalai Lama no venir a Costa Rica, pese a que la visita estaba más que preparada, se interpretó en ese momento y hasta ahora que la solicitud estaba en línea con lo que Jintao exige a sus nuevos “amigos” en la diplomacia...

Estrenamos hace unos días, el nuevo, lujoso y flamante estadio regalado Nacional, con toda la pompa que éste acontecimiento “merece”, iniciando éste acto de re-inauguración con las palabras de Óscar Arias que, en medio de una inesperada silbatina se arrojó, en un discurso algo megalómano, miles de flores y bombos, absurdos y hasta patéticos, dada la circunstancia.

Raro es que un ex presidente inaugure una obra que se inició en su gobierno pero que no concluyó en ese periodo, de ser ésta una costumbre ya establecida, habríamos visto a Abel Pacheco inaugurando en conjunto con Arias el hospital de Heredia o la Carret calle a Caldera, o que tal, el paso a desnivel bajo la rotonda de San Sebastián?, es hasta risible que dichas actitudes se den en tiquicia, supongo que seguimos siendo una finca.

No me explico aún como la cultura de la placa y el autobombo sea la finalidad última de los políticos y peor aún, que nosotros los votantes permitamos tales aberraciones!

Reconocerle a Oscar Arias la “negociación” para la construcción del inmueble es equivalente a recocerle a papá, negociar el regalito de la cajita feliz con el cajero de Mc Donalds, los chinos regalan per se algún tipo de construcción a quienes le dan la espalda a Taiwán, la finalidad de dicho obsequio es insospechada, no obstante, tenemos como ejemplo de lo que nos espera la escueta y hasta complaciente declaración de Laura Chinchilla sobre la designación de Liu Xiaobo como premio Nobel de la Paz, a sabiendas que su encarcelación va en contra de lo que, como Costarricenses, profesamos y defendemos. O sea los derechos humanos.

Fue la misma Laura Chinchilla quien en su discurso inaugural del Estadio, agradece de manera efusiva al ex presidente por lo que ella llama: “timón visionario” al tomar la decisión de establecer relaciones con China.

Les recuerdo que ese timón visionario nos sumió en el peor déficit fiscal de Centroamérica y que traerá como consecuencia un paquetazo de impuestos que, de aprobarse, va a encarecer TODO lo que tiene que ver con la clase media, desde un zapato hasta una casa, pasando por servicios de salud, legales y hasta de educación.

Ese "timón visionario", tiene a Laura metida en un zapato sin plata y con una fracción dividida entre tendencias intrapartidistas que le entorpecen el trabajo a diario.

Creo que la mesa no está tan servida como Arias decía y que Laura no exige tanto respeto como debería.