La noticia apolítica del momento sin duda alguna, es el nuevo, lujoso y “regalado” Estadio Chino Nacional, adornado con adjetivos tan rapantes como “la joya de la sabana”
El tema capara las conversaciones futboleras y faranduleras, a propósito del show de Shakira en el reducto.
Sin duda lo que más se comenta es la supuesta eficiencia de los chinitos del estadio, más con saña que con razón, entre corrillos se alaba la rapidez con la que fue construido dicho “monumento” y han salido a la luz, frases tan simpáticas como que los chinos deberían haber arreglado la platina o que los chinos deberían haber construido la pista calle a caldera etc.
La semana pasada tuve la oportunidad de conocer a la persona encargada de la gramilla de dicho estadio, quien además de a éste servidor, les dio a los presentes en la reunión cátedra sobre gramillas, cuidados, peligros y demás detalles importantes que cualquier cristiano (me incluyo) jamás imaginaría, lo único que uno como aficionado logra ver es una cancha de zacate y ya….
En fin, y continuando con el tema, nos comentaba el señor que el diseño que traían los chinos para la cancha tuvo que ser totalmente desechado ya que no cumplía las normas de no sé qué y que es perjudicial para los ligamentos de no sé cuánto y que el drenaje no iba a servir porque etc, al final se hizo como el tico recomendó y todos contentos…
Me picó entonces la chinita (y no del estadio) por el resto del diseño de dicha obra, se sabe de antemano que todos los equipos chinos importados para la construcción entraron exonerados, tanto de impuestos como de regulaciones, que los permisos fueron otorgados en tiempo récord y que la supervisión nacional (para variar) fue ineficiente, tanto así que pasaron meses antes de que las autoridades descubrieran que con estos equipos y materiales exonerados estaban construyendo unas torres privadas…. Camiones sin marchamos, un botadero clandestino sin permiso, cero medidas de seguridad en el sitio y de los salarios no sé, pero no creo que fueran muy buenos….
Cualquier empresa constructora nacional grande habría podido construir una obra de ese calibre en ese tiempo récord, claro, si hubiese gozado de tales beneficios y 600 empleados de poco salario y dispuestos a todo.
El pensar que todo lo foráneo es mejor que lo nacional es una patología que debe ser YA extirpada del pensamiento popular, basta ya de creer que los ticos no podemos, cuando tenemos a una constructora tica con un contrato enorme en el Mega-Proyecto de ampliación del canal de Panamá y todos los grandes proyectos que los ticos hemos desarrollado en este país, edificios, carreteras, hidroeléctricas etc, de altísimo nivel, que cumplen con estándares de calidad mundial.
Que el estadio es lindo es lindo, pero debo decir que hasta que no se venga un buen meneón, no lo estreno.
Viva el intelecto tico carajo!