Nunca un día de la madre tuvo un
significado tan cercano como este.
Sin quitarle mérito a todo lo que
siento por Mamá y al valor que le doy a su valentía, entrega y sacrificio para
los que llevó “para arriba”; desde la perspectiva de un hijo agradecido la
maternidad se ve como desde abajo, el sentimiento de protección, ayuda incondicional
y disponibilidad está presente permanentemente, el amor que se siente por la
mamá no tiene descripción y se vive con fervor. Si no fuera por sus enseñanzas
y valores, no sería el hombre que soy ahora.
Aunque considero la fecha más
comercial que sentimental, siempre la celebro con mi Mamá y ahora mi Suegra, pero
más enfocada en compañía que en otra cosa.
Todos saben que soy papá y he
vivido de cerquita todo lo que implica la maternidad desde que la prueba resulta
positiva, cosas como los achaques, cambios de genio, crecimiento sostenido del
abdomen, orinadera, paso lento, contracciones, noches incómodas, dolores de
pechos, dolores de pies, dolores de piernas, parto, piquete, costura,
incomodidad, dar de mamar, dar de mamar, dar de mamar y dar de mamar…..
Maes seamos realistas, no tenemos
los huevos.
No sufrí ninguna de las
anteriores… en este complicado proceso los hombres somos ceros a la izquierda,
al menos físicamente y nos es difícil asimilar con certeza la realidad de la
maternidad pues somos incapaces de vivirla.
La fortaleza que tiene las
mujeres para afrontar con valentía y amor estas situaciones pone en perspectiva
la real ubicación del sexo débil, es de admirar la manera en que ellas
atraviesan el camino que no va a terminar nunca, un hijo es para toda la vida.
Nunca un día de la madre tuvo un
significado tan cercano como este.
A todas las mujeres que conozco y
que son madres les digo: ustedes son valientes, sacrificadas y fuertes, jamás
imaginé todo lo que han vivido y lo que han sufrido, ahora entiendo el
sentimiento que tienen por sus hijos (as)se de lo que son capaces por ellos (as)
Hasta que lo viví con María,
mujer valiente y amorosa, todo este trajín, tengo una visión más acertada de
todo lo que implica la capacidad de dar vida.
Compas, no hagamos el ridículo regalando
una plancha o una refri, la maternidad vale millones más que un puto
electrodoméstico, no quedemos mal, regalemos amor TODOS los días del año…